Refugio Ciclista 2019
Refugio Ciclista
Por años, en Valparaíso se ha recibido miles de ciclistas en la noche del 8 de Diciembre, fecha en que se cierra la Ruta 68 para la peregrinación con motivo de Lo Vásquez, sin embargo, la ciudad se encontraba lejos de estar capacitada para la recepción de esta ola de turistas en dos ruedas. El panorama habitual ha sido ver personas durmiendo en plazas, playas y otros espacios, sin poder descansar, sin seguridad ni elementos básicos como agua o baños. Pensar esto se hace cada vez más complejo cuando se considera que al descansar se ha dado que los ciclistas pueden despertar sin sus bicicletas o con panoramas desfavorables. Por otro lado, las empresas de buses suelen abusar de los precios para volver a la capital llevando bicicletas en maleteros y surge un conjunto de servicios que viene a remediar esto, lo cual deja en evidencia la falta de interés humano.
En un contexto de estallido social por los derechos sociales para chilenas y chilenos, llega un nuevo 8 de Diciembre, en que el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, autoriza personalmente la realización del Refugio Ciclista en el Instituto Superior de Comercio de Valparaíso. En esta ocasión es posible notar que varios asistentes en las versiones anteriores de esta iniciativa llegan al refugio y se interesan en el desarrollo de esta instancia. En algunos casos, incluso buscan coleccionar los adhesivos en sus bicicletas y las tarjetas entregadas en el lugar.
Dentro del impacto generado, en esta tercera implementación del espacio para recibir ciclistas provenientes de la capital se contabilizan casi 500 personas recibidas durante la noche, manteniendo siempre la modalidad de propina voluntaria para financiar las actividades de la organización durante el año. Además, se han superado los 1000 (mil) refugiados en total.
Dado el contexto nacional, desde el Alboroto Cletero V Región se organiza la Ciclomarcha XL: La 5ta y Santiago se unen en un recorrido que parte en Plaza Victoria (Valparaíso) y llega hasta Reñaca, realizando hitos en conjunto con la Revolución Ciclista en Plaza José Francisco Vergara (Viña del Mar) e ingresando, por primera vez y de forma pacífica, a la Quinta Vergara en forma masiva.